Tos: Causas, tipos y cómo aliviarla

Para muchas personas, la tos interfiere con las actividades diarias y provoca molestias importantes. Por eso es habitual buscar formas de aliviarla. Sin embargo, antes de tratarla es fundamental identificar la causa: algunas toses son un problema leve, mientras que otras pueden ser señal de una afección más grave. Conocer su origen ayuda a elegir el tratamiento adecuado y responder correctamente al síntoma.

Tos: un reflejo protector

La tos es un mecanismo que protege los pulmones. Cuando los receptores del tracto respiratorio se irritan, los músculos se contraen y expulsan aire con fuerza —¡hasta 160 km/h!—, ayudando a mantener las vías respiratorias despejadas.
Este reflejo natural evita daños y complicaciones, al eliminar secreciones, gérmenes o irritantes externos.

¿Qué provoca la tos?

Existen múltiples causas de la tos, desde un resfriado común hasta enfermedades más serias. Entre las principales se encuentran:
Infecciones respiratorias: resfriados, bronquitis, neumonía o tos ferina.

• Reflujo gastroesofágico: los jugos digestivos irritan la garganta.
• Alergias: el polvo, polen u otros alérgenos desencadenan el reflejo.
• Contaminación ambiental: cada vez más relacionada con irritaciones respiratorias.
• Asma: la tos es un síntoma frecuente.
• Efectos secundarios de medicamentos: algunos fármacos pueden provocarla.
• Estrés y ansiedad: en algunos casos, generan la llamada tos psicosomática.

Identificar la causa es clave para saber si la tos requiere solo cuidados básicos o una atención médica más específica.

Cómo encontrar la causa de la tos

Dado que la tos puede tener múltiples orígenes, identificar su causa es fundamental. Solo así se puede aplicar un tratamiento adecuado sin enmascarar una enfermedad respiratoria más grave y combinarlo con el tratamiento causal.

Pero, ¿cómo sabe el médico cuál es la causa subyacente? A veces, basta con escuchar el tipo de tos. Otras veces, se requiere un examen físico completo y un historial médico detallado, ya que los síntomas que acompañan a la tos pueden dar pistas importantes:

• Tos infecciosa → suele venir acompañada de fiebre, dolor de garganta o secreción nasal.
• Tos por reflujo → se asocia a acidez, regurgitación o sensación de saciedad tras comer.
• Tos alérgica → relacionada con fiebre del heno, lagrimeo o conjuntivitis.

Algunas veces, la tos persiste varias semanas después de un resfriado. Esto se llama tos postinfecciosa y se debe a que los receptores de las vías respiratorias se vuelven más sensibles. Aunque suele ser inofensiva, una tos persistente siempre merece atención médica.

Cómo aliviar la tos

La base para manejar la tos es identificar y tratar su causa. Si la tos resulta molesta, también se pueden aplicar medidas para aliviarla y reducirla como síntoma. Entre las opciones disponibles se encuentran medicamentos que pueden calmar la tos, diluir la mucosidad o facilitar la expectoración, según se trate de tos seca o húmeda/productiva.

La tos puede afectar la vida diaria, pero conocer su origen permite actuar de manera más eficaz. Mientras tanto, existen formas de apoyar el alivio de la tos y mejorar el confort durante los episodios.

Entre estas opciones están los medicamentos de origen vegetal, disponibles en farmacias y diseñados para actuar sobre la tos o favorecer la expectoración..

Un ejemplo es, Bronchiclear^® es un medicamento a base de plantas que con su combinación de tomillo y hojas de hiedra que actúa como expectorante en caso de tos productiva y tiene efecto contra síntomas de bronquitis aguda. Gracias a sus ingredientes, alivia eficazmente la tos, despeja las vías respiratorias y además Acelera el proceso de recuperación.